Autor: Francisco Gosalvez 

En el aula nº6 del edificio de Atzavares resonaba la voz grave y profunda de Martín Caparrós, a veces algo intermitente entre idas y venidas al Buenos Aires de su juventud, y otras veces serena y lúcida para hablar del periodismo, en todas sus formas. Durante las dos horas y media que duró el seminario del pasado lunes, los estudiantes de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche pudieron mantener una conversación junto a dos profesionales del mundo del periodismo como son Carles A. Foguet, director de comunicación del magazine JotDown, y el escritor argentino Martín Caparrós.

 En la sala, casi abarrotada por completo desde el inicio del taller, se discutieron diversas cuestiones, desde cómo el sistema del periodismo convencional había entrado en crisis, pasando por los sinceros consejos hacia los jóvenes periodistas. También se reflexionó en torno a los matices que implican los cambios gramaticales y de voz entre la primera y tercera persona en la narración. Caparrós recordó sus orígenes como estudiante de lo que en argentina eran, hace ahora 43 años, escuelas de periodismo, en las que se les enseñaba taquigrafía y nociones básicas para poder funcionar en una redacción. “A nosotros no nos enseñaban a narrar en la escuela de periodismo”, explicó Caparrós y apuntó: “Considero que la única forma ineludible para aprender a ser periodista es leer. Es absolutamente necesario comprender la esencia de la narración”.

“La única forma ineludible de hacer periodismo es leer, es absolutamente necesario ya que un periodista necesita comprender la naturaleza de la narración”,  Martín Caparrós

El público, desacostumbrado a la franqueza con la que el escritor habla, pudo degustar de primera mano las experiencias como cronista incesante y los conocimientos que el invitado compartió. “El cronista es alguien que vive buscando en sus viajes un principio para su historia”, aseguró casi ensoñado buscando en sus propias vivencias. Además, puso en valor el arranque de todo texto periodístico porque, a su juicio, gran parte del éxito de cualquier texto periodístico se decide desde el comienzo: “Cuando no consigo encontrar posibles inicios apetitosos a mis crónicas estoy ansioso, al igual que me siento relajado cuando tengo varias opciones”.

Se habló también de la naturaleza de la propia crónica, siendo descrita por el periodista argentino como “un género que dice yo”, refiriéndose a la idiosincrasia de la crónica como un género en el que el autor debe, además de reflejar lo que vio, ofrecer su particular experiencia al lector. “Cuando quiero decir que uso el yo no quiero decir que imponga mi opinión, quizás todo lo contrario, mi yo no busca ni consigue imponerse a la opinión del lector”, señalaba Caparrós al hilo de sus vivencias como cronista de viajes.

“El cronista es alguien que vive buscando un principio para su historia”, Martín Caparrós

El final del coloquio se acercaba y las últimas respuestas fueron enfocadas a explicar los cambios que han sucedido en las últimas décadas en la estructura y forma del periodismo. “Muchas veces se me pregunta por cómo era el periodismo cuando yo empecé, a mi me gusta ilustrarlo como que antes los periodistas escribían con una copa de ginebra al lado de la mesa y ahora con un mate”, comentó el escritor. Según el cronista, el sistema del periodismo no debe ir tanto en dirección de lo que otros quieren leer, sino que el periodismo debe escribir sobre “lo que vale la pena escribir”.